Deberes para casa
Ahora que vuestros hij@s están en Primaria comienza para ellos una nueva importante etapa educativa, al igual que en su momento lo fue la Educación Infantil, y ahora un nuevo reto se plantea para ellos y para vosotros como padres/madres.
Un tema importante son los DEBERES, para muchos de vosotros necesarios y para otros, no tanto, por eso me parece interesante que leáis lo que a continuación os escribo.
Los maestros encontramos como justificación en los deberes que son un medio para afianzar aprendizajes y suponen una forma para integrar y fijar el contenido trabajado. Por tanto, los deberes son un complemento para las clases porque el alumno puede realizar ejercicios prácticos correspondientes a los contenidos teóricos de las clases. Vienen a ser un repaso de la materia estudiada y/o explicada en clase y un factor eficaz para formar buenos hábitos de estudio.
Los padres, en cambio, afirman que la responsabilidad de la instrucción de sus hijos debe ser totalmente asumida por los maestros que son los que están preparados para hacerlo. Por otro lado, no consideran oportuno que los hijos continúen la jornada de trabajo en casa.
Ambas posturas son correctas, respetables y defendibles.
El hacer las tareas significa crear en los niños HÁBITOS de estudio. (Leer, escribir, estudiar,…) de esta forma le ayudamos también a ser responsables y a asumir responsabilidades.
Y es que por otro lado, no nos damos cuenta que ayudar a los hijos a hacer las tareas escolares, estar con ellos para poder servir de apoyo, es una forma genial para hacer algo con ellos convivir, conocerse mutuamente, hablar de problemas o situaciones. Son momentos en los que los niños se sinceran y, cuando hay tiempo suficiente, hablan más de lo que creemos y cuentan experiencias que han visto o vivido en su entorno escolar y este hecho, permite a los adultos, conocer el mundo que viven los hijos y permite, también, un acercamiento entre los distintos miembros de la familia.
Hay que apuntar que para ayudar a un hijo a hacer su tarea no hay que tener un nivel alto de conocimientos de la materia de estudio. No vale eso de que “yo no puedo ayudar a mi hijo porque no me acuerdo”; “hace mucho tiempo que estudié”, etc. Se puede ayudar estando a su lado y hacer otra tarea en casa, leyendo y dando ejemplo de la importancia de la lectura.
Por tanto, EL TIEMPO DE TAREA DEBE SER PLANIFICADO Y APROVECHADO. Es preciso organizar el tiempo y habituar al niño a esto.
CONSEJOS PRÁCTICOS que pretenden resumir y guiar la actuación y papel de los padres hacia los deberes de los hijos.
▪ Ambos padres deben colaborar en el seguimiento de los deberes de sus hijos. Establecer un sistema de turnos para trabajar con los hijos y comunicarse a diario cualquier asunto de interés.
▪ Hacer que vuestro hijo informe personalmente de sus avances o problemas al padre que no ha trabajado ese día con él.
▪ Respetar el tiempo de estudio de vuestro hijo y no interrumpirle con asuntos secundarios que podéis tratar más tarde.
▪ Reservar un lugar específico para trabajar y procurar que siempre sea el mismo.
▪ Atender a posibles alteraciones de carácter físico o emocional de vuestro hijo que puedan influir en el cumplimiento de los deberes (dolores, malestares, preocupaciones, disgustos, enfados…)
▪ No presionar demasiado a vuestro hijo con el cumplimiento estricto del horario, lo importante es que él lo encuentre útil, aprenda a respetarlo y adquiera un hábito de estudio.
▪ Ofrecer a vuestro hijo una recompensa después del trabajo realizado y permitir que realice alguna actividad que le satisfaga.
REPASO VERANO 2016
Hace 8 años